Wednesday, April 4, 2012

"CORREA NO VA A LA CUMBRE DE LAS AMERICAS (+ CARTA AL PRESIDENTE DE COLOMBIA)"

"Correa no va a la Cumbre de las Américas (+ Carta al Presidente de Colombia)


2 Abril 2012133 Comentarios
rafaelcorrea-tw1Rafael Correa, presidente de Ecuador, no asistirá a Cartagena a la VI Cumbre de las Américas. El presidente ecuatoriano rechazó la invitación del presidente Juan Manuel Santos, y en una carta dirigida al mandatario colombiano mantuvo su postura frente a la ausencia de Cuba en la mencionada cumbre.
Según el diario El Comercio (Quito), la carta dice que después de haber reflexionado detenidamente, “he decidido que, mientras sea Presidente de la República del Ecuador, no volveré a asistir a ninguna Cumbre de las “Américas”, hasta que se tomen las decisiones que la Patria Grande nos exige (sobre la participación de Cuba en dicho encuentro)”.
Correa fue el primer mandatario que exigió la presencia de Cuba en la Cumbre, exigencia que motivó al gobierno colombiano adelantar gestiones diplomáticas, en busca de consenso, para superar el obstáculo en que se convirtió el escenario de la invitación al gobierno de La Habana.
El presidente colombiano Juan Manuel Santos se reunió con el presidente de la isla, Raúl Castro y con Hugo Chávez y manifestó la imposibilidad de invitar a Cuba.
Correa, entonces, dijo que consultaría con “el pueblo ecuatoriano” sobre su presencia en Cartagena. Este 2 de marzo dirigió su respuesta definitiva. No estará en la Cumbre de las Américas.

La carta de Rafael Correa a Juan Manuel Santos

Señor Doctor
Juan Manuel Santos
Presidente Constitucional de la República de Colombia
Estimado Presidente y amigo:
Valoro y agradezco profundamente su gentil y reiterada invitación a la VI “Cumbre de las Américas”, a celebrarse en la hermosa Cartagena de Indias los días 14 y 15 de abril. Lamentablemente, pese a que en la V Cumbre de las Américas, celebrada en Trinidad y Tobago del 17 al 19 de abril de 2009, se rechazó la incomprensible exclusión de la República de Cuba de las cumbres americanas, una vez más, este país hermano no ha sido invitado.
Por definición, no puede denominarse “Cumbre de las Américas” a una reunión de la cual un país americano es intencional e injustificadamente relegado. Se ha hablado de “falta de consenso”, pero todos sabemos que se trata del veto de países hegemónicos, situación intolerable en nuestra América del Siglo XXI.
De igual manera, es inaceptable que en estas cumbres se soslayen temas tan fundamentales como el inhumano bloqueo a Cuba, así como la aberrante colonización de las Islas Malvinas, los cuales han merecido el rechazo casi unánime de las naciones del mundo.
Jamás buscaríamos ocasionar el más mínimo problema ni a su gobierno ni a nuestra querida Colombia. Se trata, como decía Bolívar, de sentir verdaderamente que la Patria es América, y en algún momento comenzar a denunciar y enfrentar con fuerza estas, repito, intolerables y hasta aberrantes situaciones. Por ello, después de haber reflexionado detenidamente, he decidido que, mientras sea Presidente de la República del Ecuador, no volveré a asistir a ninguna Cumbre de las “Américas”, hasta que se tomen las decisiones que la Patria Grande nos exige.
Nuestros pueblos bien pueden cansarse de que sus mandatarios estén en tantas cumbres, mientras todavía existen demasiados abismos por superar, como la pobreza e inequidad que todavía mantienen a América Latina como la región más desigual del mundo; la ineficaz estrategia de lucha contra el problema mundial de las drogas; la profunda transformación del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, hoy celador de intereses ajenos a sus principios fundacionales; la vigencia de una verdadera libertad de expresión que no se encuentre reducida a los intereses de los negocios dedicados a la comunicación social; o, la completa supremacía del capital sobre los seres humanos, como lo demuestra la crisis hipotecaria en España, que afecta a centenares de miles de ciudadanos, entre ellos muchos migrantes latinoamericanos.
Esperamos que nuestra ausencia sea una cordial invitación a debatir lo esencial y a actuar en consecuencia, ratificando el aprecio y respeto que sentimos por todos nuestros colegas, Jefas y Jefes de Estado del Continente, queridos amigos con quienes compartimos sueños de mejores días para nuestros pueblos.
Deseamos, por el bien de la región y del mundo, que la Cumbre de Cartagena sea exitosa. El deseo de acompañarles es enorme, sólo superado por la firmeza de nuestras convicciones.
¡Hasta la victoria siempre!
Rafael Correa Delgado
Presidente Constitucional de la República del Ecuador
Quito, abril 2 de 2012.
(Carta Tomada de Alainet . Imformación de Semana.com)"
Bookmark and Share

GRAN DESAFÍO DEL SIGLO XXI: LA INJUSTAMENTE OSADA E INCONGRUENTE EXCLUSIÓN DE CUBA A LA CUMBRE DE LAS AMÉRICAS...


El aldabonazo de Correa y la Cumbre de las Américas
Ángel Guerra
La llamada Cumbre de las Américas (CA) fue una iniciativa del gobierno de William Clinton para imponer a América Latina el Alca, agresivo instrumento de recolonización económica, política y cultural, concebido durante el gobierno de George H. Bush. Recién comenzaba a aplicarse en México(1994) con el nombre de TLCAN.
Señal del cambio de época –como lo llama el presidente ecuatoriano Rafael Correa–, el Alca fue derrotado en la CA celebrada en 2005 en Mar del Plata, hecho trascendental para impedir la anexión de América Latina. Ello se debió a las grandes movilizaciones populares contra las políticas neoliberales, encarnadas en la decisión de los presidentes Néstor Kirchner, Hugo Chávez y Lula da Silva. Emergía una nueva situación de independencia, unidad e integración regional con mecanismos como la Alba, Unasur y más recientemente la Celac, y un rechazo creciente a las inhumanas políticas de libre mercado.
En este contexto y volviendo a Correa, en una muy cordial carta dirigida el 2 de abril a su homólogo de Colombia Juan Manuel Santos, el ecuatoriano expone las razones por las que después de reflexionar mucho ha llegado a la decisión de no asistir a las Cumbres de las Américas hasta que se tomen las decisiones que la Patria Grande nos exige. En obvia alusión a la ausencia de Cuba puntualiza que “no puede denominarse ‘Cumbre de las Américas’ a una reunión de la cual un país americano es intencional e injustificadamente relegado”. Se ha hablado –añade– de falta de consenso, pero todos sabemos que se trata del veto de países hegemónicos, situación intolerable en nuestra América del Siglo XXI. Los países hegemónicos a que se refiere Correa no son otros que Estados Unidos y Canadá, pues ninguna nación de América Latina o el Caribe se opone a la presencia de Cuba en el ámbito hemisférico, como lo demuestra su elección para presidir el próximo periodo de la Celac o la reunión de la OEA en Honduras, donde se acordó derogar el injusto e inmoral acuerdo que la excluía. Fue una reparación moral y legal pues a La Habana no le interesa regresar a la OEA a causa de su infame trayectoria como valedora de las dictaduras militares y las agresiones y ocupaciones imperialistas en nuestra América.
Correa añade que es inaceptable soslayar en estas cumbres temas como el inhumano bloqueo a Cuba, así como la aberrante colonización de las Islas Malvinas, los cuales han merecido el rechazo casi unánime de las naciones del mundo.
Cabe recordar que el presidente ecuatoriano propuso en la 11 Cumbre de la Alba (Caracas, 4 y 5 de febrero) que los países del mecanismo no asistieran a la reunión de Cartagena de Indias si Cuba no era invitada. No obstante que la cumbre no tomó una decisión final sobre la asistencia de los miembros, Chávez concordó con Correa en que si Cuba no era invitada se considerara su propuesta y sugirió consultar al mandatario colombiano Juan Manuel Santos en su condición de anfitrión. Santos declaró que no dependía de él y que debía buscar el consenso. No había terminado de decirlo y ya un vocero del Departamento de Estado afirmaba que Cuba no calificaba para asistir. Cuba no hubiera pedido nunca asistir a la CA puntualizó el presidente Raúl Castro en la cumbre de Caracas, pero otra cosa era ante una invitación del país anfitrión. Por eso, preguntado en La Habana por la canciller colombiana María Ángela Holguín sobre el interés cubano en participar su respuesta fue afirmativa. El posterior viaje de Santos a la isla –que no gustó nada al imperio– para explicar que no había logrado el consenso puede apreciarse como un gesto amistoso pero que en modo alguno modificaría la decisión de excluir a Cuba ya tomada por Washington.
En la reunión de Cartagena no sólo exigirán la asistencia en lo adelante de Cuba a las CA los miembros de la Alba que concurran. También lo harán Argentina, Brasil, Perú, los miembros del Caricom y la propia Colombia como ha prometido Santos. De la misma manera que en concordancia con lo acordado en la reunión fundacional de Celac (Caracas, diciembre de 2011) se demandará a Obama el levantamiento del criminal bloqueo. El mandatario estadunidense asiste a esta cumbre sin haber cumplido con su promesa en la anterior (2009) de un cambio en la política estadunidense hacia América Latina y el Caribe, de modo que estará a la defensiva desde el principio. Sospecho que esta será la última Cumbre de las Américas.
P.D. Las Malvinas son argentinas.
--------------------------------
El resistirse a lo irresistible no siempre fortalece a quienes se creen irresistibles, sí, a aquell@s que ‘no mandan obedeciendo a sus mandantes’… FIDEIIUS (Fideiius).
http://www.youtube.com/watch?v=O3JI-axaRF4

No comments:

Post a Comment